Si decimos que en la calle hay basura pero la foto que tenemos muestra unas aceras impecables... pues Phoshop nos ayuda a ponerla asquerosa (y que nos perdone el alcalde de la localidad por la mala propaganda). Podemos incluso colocar el cadáver de una ballena, si estamos de humor.
Si reseñamos un evento y en la foto aparece un enemigo nuestro (ja, ja) lo dejamos como en la foto anterior que gustosamente nos ha enviado una lectora. La retocada es una ex-amiga, quien aparentemente le quitó el novio.Esto plantea un cambio fundamental del periodismo. Ahora la verdad no está en la calle, sino en la computadora.
Si esa malévola verdad se opone a nosotros, lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca. Y si no, la borramos.
Un ejemplo bajo cero
Veamos otra situación. Queremos afirmar que un glaciar andino en particular está perdiendo hielo debido al calentamiento global. No obstante, el encargado del archivo fotográfico (un pasante que ocupa 99,9% de su tiempo en Facebook), nos envía una foto de las montañas rebosantes de nieve.
Es una foto hermosa, pero no sirve. Hay demasiada agua congelada, demasiado azul del cielo. Es un paraíso templado que no hace pensar en calentamiento global, ni cambio climático, ni destrucción de la capa de ozono. ¿Tiene sentido crear una Fundación para salvar esto?Recuérdese que nosotros queremos crear conciencia, para lo cual hay que aterrorizar a los pasivos que pierden su tiempo con insulsos desfiles de moda o con qué ángulo recóndito dejó ver Britney Spears esta vez.
Hay que sacudir a esa gente, por lo cual vamos a PhotoShop (o cualquier programa similar, lo que pasa es que Adobe nos da un porcentaje por cada venta que le remitimos). Bien, en PhotoShop producimos esta joya del fotoreporterismo, para "probar" la destrucción de nuestros queridos glaciares.
¿Qué hicimos? Primero viramos a rojo las montañas, a ver si los más despistados creen que las piedras han comenzado a sangrar producto de los nocivos rayos X, Y y Z de un sol sin capa de ozono.En primer plano pusimos una pila de basura... una foto fácil, tomada a un rincón cualquiera de mi habitación. Yo soy muy sentimental y me cuesta botar las cosas, incluso los cartones de leche luego de tres o cuatro meses de haber sido usados. Soy "conservacionista" ¿saben?
Finalmente, para añadir realismo y dramatismo, pintamos el cielo de verde y le pusimos una pequeña chimenea de 5.000 metros de altura que emite gases tóxicos desde Chile hasta México. La desenfocamos un poco y voilà. Incluso, agregamos ¡otra! con el cadáver de una ballena junto a una inspectora de sanidad, que nos lo exige el sindicato de recolectores de la Patagonia.
Un fragmento de la nota publicada:Destrucción y basura en el Glaciar¿Ah, y ahora? Impresionados ¿no? Bueno, por favor, acudan inmediatamente a Photoshop o a un programa similar y comiencen la maravillosa experiencia de cambiar la realidad para no tener que adaptarnos a ella.
Rocas sangrantes, desperdicios de tres continentes y cadáveres de mamíferos marítimos claman con urgencia la colaboración de todos a la Fundación "Salven el Glaciar", una subsidiaria de la Organización Malcom U. Nicador...
Debo hacer una aclaratoria sobre la foto intervenida, al principio de su maravilloso artículo. Nadie la alteró para perjudicarme sino al revés. Lo digo con propiedad porque ésa soy yo, la de la derecha. Muchas gracias por mejorarme bastante en la de la izquierda.
ResponderEliminar